En 2016, Multiservicios Sofa, S.L., una empresa dedicada a la importación de material de oficina y suministros escolares en Bata, recibió una transferencia de 741 millones FCFA desde Gabón, depositada en su cuenta del Banco Nacional de Guinea Ecuatorial (BANGE). Lo que siguió fue un descarado plan de robo encabezado por el banco, que en ese momento estaba bajo la dirección de Manuel Osa Nsue Nsua, actual Primer Ministro del Gobierno. En lugar de permitir el acceso a los fondos, BANGE recurrió a una táctica corrupta: la infame y falsa acusación de golpe de Estado, una herramienta recurrente del régimen para deshacerse de sus opositores. Lo que no se sabía es que ahora los directivos bancarios utilizan esta misma estrategia para apropiarse de dinero ajeno.
El banco, entonces bajo el control de Osa Nsue, con la clara complicidad del sistema judicial, no sólo bloqueó los fondos, sino que fabricó acusaciones infundadas de actividades subversivas contra el director de Multiservicios Sofa, S.L., todo con el objetivo de apropiarse de esos fondos. Estas acusaciones, aunque comunes en el contexto represivo de Guinea Ecuatorial, revelan una corrupción a niveles insospechados cuando incluso una entidad financiera estatal adopta dichas prácticas para enriquecerse. El resultado fue la detención arbitraria del director, quien pasó meses encarcelado sin motivo real, mientras BANGE mantenía el control sobre los fondos bloqueados. ¿Cuál puede ser el futuro de un país cuando el Primer Ministro, con antecedentes de corrupción y maniobras ilícitas, ha dirigido uno de los principales bancos del país? Las perspectivas son sombrías.
Ponciano Mbomio Nvó, el abogado defensor, interpuso una demanda por incumplimiento de contrato, que milagrosamente ganó en todas las instancias judiciales, desde el Juzgado de Primera Instancia hasta la Corte Suprema de Justicia. Sin embargo, la farsa judicial continuó. A pesar de las sentencias firmes a favor de Multiservicios Sofa, S.L, el sistema judicial de Guinea Ecuatorial ha demostrado ser incapaz y cómplice al negarse a ejecutar sus propios fallos, mostrando su subordinación a los intereses corruptos que gobiernan el país. En lugar de proteger a los ciudadanos, la justicia se ha convertido en una herramienta para destruirlos.
El culmen de la injusticia llegó cuando Santiago Casto Nvono Bibang, entonces Director de Gabinete del Vicepresidente y actual Viceministro de Turismo, ordenó la detención del director de Multiservicios Sofa, S.L justo cuando la sentencia debía ser ejecutada. Esta detención prolongada durante tres años y ocho meses no fue más que otra maniobra orquestada para garantizar que los fondos no fueran liberados. Una vez más, el sistema judicial y político de Guinea Ecuatorial muestra su verdadera cara: un mecanismo que falla en impartir justicia y protege los intereses de los corruptos.
A pesar de la orden de ejecución de la Corte Suprema en 2023, BANGE, con el respaldo del corrupto sistema judicial, ha bloqueado cualquier intento de ejecutar la sentencia. Mientras tanto, la empresa ha quedado completamente arruinada, su director devastado y el abogado sigue sin recibir sus honorarios. Todo mientras el banco sigue beneficiándose de este robo institucionalizado, protegido por un sistema judicial que ha perdido toda credibilidad.
Diario Rombe publicará más detalles y expondrá con mayor precisión los nombres y el papel de cada uno de los actores involucrados en esta trama vergonzosa.