¡Ven queridos y queridas! No es que son pendejos los políticos cuando nos ofrecen comida y alcohol por el voto, la sociedad y el hondureño de hoy ha sido construido de manera y fría y calculada durante 500 años, ¿O, es que creían que el amor era todo, creían que era casualidad de malos gobiernos la pobreza, la enfermedad, la educación colonial, no empezar a deliberar el nombre de Honduras tomado de la “honduras” del español salvaje y ladrón? ¿Por qué los medios de comunicación del poder nos embrutecen con contenidos de superstición, mito, magia, violencia, religión alienante y política sucia como “democracia”? Nada es aparente, ese ese el sistema de atraso que, o derrotamos, o lo heredamos otros 500 años a nuestra descendencia y, los vividores del capital, rezando dentro de 200 años pidiendo el voto a nuestros tataranietos ¡No es paja! Eso somos hoy de nuestros tatarabuelos.
Estos políticos malnacidos jamás han sido originales, ahí anda una dunda con un acrónimo del nombre de esos que hacía en su tonta juventud de colegio, y otra cachureca salió 667, se pasó de bestia en su día político, todo un otoño con apariencia de primavera, allá fue a decir que “JOH es el mejor presidente” ¡Dios Mío! Eso es lo malo de no consumir hierro en el vientre de la madre, no se desarrolla el cerebro, pero no olviden el porqué hablan mierda, a una ya le dijo el marido, así vas a lograr que esta chusma te dé el voto y sigás de diputada, decí “pepsi” para reírte como modelo cuando te ensucien esas viejas de barriada, y así y así, mandan a “la Americana” a toda la familia y en vacaciones al complejo de 17 museos del prestigioso Instituto Smithsoniano de Arte Americano, que incluye, galerías y un zoológico, entre otros atractivos de historia y cultura universal.
Entonces entendemos esa contradicción aparente… ¿O no? ¿Por qué al pobre se le debe dar canciones vulgares, hacer creer que ser pobre es “cool” en campaña electoral, que tomar sopa de churro es lo más maravilloso? ¿Por qué al pobre no se le habla como adulto y todos los mensajes son infantilizados y hechos chistes? Tampoco nos hablan de teatros, ciencia, arte, moda, construcciones dignas de los ciudadanos ¿Por qué todo para el hondureño debe ser vulgar, religioso, falto de gusto, chabacán, ordinario o estúpido? ¿Ellos viven su vida de esa manera? ¡Nooo! Aunque en campaña alaben el “life style” del pobre no los llevan a sus vidas, los hijos nadan en piscinas infinitas de agua purificada, son los niños destinados aprender inglés perfectamente a los quince años en las bilingües VIP, entrenados para mandar a los hijos de los obreros, mientras el otro conoce el semáforo y se convierte en un tigre esquivando las balas; ellos ya conocen a Mickey Mouse, crecen y, como Monique, se vuelven usual visitantes de la 5ta Avenida, el Central Park, el Empire State Building o el Rockefeller Center; el otro crece en el pueblo botado o el barrio que hierve de criminales y se hace chepito o se mete al batallón para sentirse seguro y creyendo que saldrá de la miseria; uno termina mandando y el otro terminará escoltado a los hijos del otro, mientras salen del “high school”. ¿Coincidencia o solo una cadena ordenada de maldad y perversión? Sea usted lector, quien pueda pensar, las teclas se me gastan… Y ojo, el problema no son las buenas condiciones de uno, el reclamo es desigualdad histórica, confeccionada para que nada cambie, cero oportunidades para todos.
¿Por qué creen que el 95 por ciento del total de la población hondureña jamás han usado ni utiliza los aeropuertos internacionales?, queda de tarea. Los que migran, esos que cuando la campaña ha terminado pueden volver a ser los invisibles, los despreciados, menos sus miles de millones de dólares que aquí van a las bolsas de esas poquitas familias, jejeje, esa es la importancia, pero como seres humanos neles pasteles, son simple escalera sobre la que se puede hacer billete verde y también sirven con sus votos para alcanzar el pedestal del poder y darle una calidad de vida, otra vez a esas poquitas familias, amigos y gente de confianza. Un voto es solo el lomo puesto para que puedan subir como monos “en la montaña de fango” que Nietzsche habla.
Bailes idiotas, comerciales sin razón, no discuten planes de nación, les da miedo la dignidad, le gritan al extranjero “cuando yo sea presidente prometo arrodillarme” ¡Por supuesto! Un pueblo con las venas llenas de opio, que nos enseñan que la virgencita aparece en el pan blanco, que el extranjero vale más que el nacional, que somos dulces (como sinónimo de idiotas), así es hermoso gobernar, con gente callada, bien portada, con la esperanza que al morir barreremos calles de oro por la eternidad en los cielos, que los “ricos” disfruten en vida, porque cuando se mueran van al infierno por malos; pues nosotros seremos felices cuando ya muertos. Este es el medio donde se fermenta la injusticia social, soledad, crueldad, ignorancia y morbo asqueroso de los que como “Toño” (dictadura familiar viviendo del sudor público, nunca han trabajado), pasaron de tener cachetes con agujeros a solamente una cara deforme, mientras el rótulo en la esquina que me pusieron se desvanece como el retrato de Dorian Grey, solo que sin la cultura, ni belleza de Dorian. Un Juan Diego que era el segundo hombre de Ricardo en la alcaldía, una que fue saqueada y dejó a la capital en abandono total ¿Y me decís que ahora sí podés generar un cambio? Es un juego de bobos, no jodás.
¿No es extraño que Salvador les hable a sus seguidores como si estuviera narrando un partido de fútbol? Y con disfraz de pobre sabe cómo hablarles para que lloren y rían un rato y luego le den el voto; sin embargo, ¿no desea que sus hijos nazcan en Honduras “WFT!”? O sea, si entiendo la idea, es algo así como ¿quiero ser el presidente de un país de donde mis hijos no quiero tengan nacionalidad? Y obviamente ese comportamiento es una conducta de imitación de sus empleadores, los que siempre vio desde abajo, cómo llevaban a sus mujeres a parir a otro país –o a sus hijas abortar, según casos, aquí ellos lo prohíben ja,ja–, pues al final, Honduras es la casa de campo, pero los Estados Unidos es la casa de la ciudad, aquí se hace el dinero fácil y allá se gasta fácilmente, aquí son “alguien”, allá nadie los determina, una conducta cobarde y rapaz, no viven en Honduras, pero si viven de Honduras.
Ellos no son ignorantes… son perversos. No tienen perdón, porque saben lo que hacen. Avanti.
