Los principales líderes europeos han celebrado este martes el anuncio del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, sobre el acuerdo de alto el fuego en Líbano para poner fin a las hostilidades entre el Ejército israelí y el partido-milicia chií Hezbolá. El presidente de Francia, Emmanuel Macron, –país «garante» en el acuerdo– ha asegurado que el anuncio «constituye la culminación de los esfuerzos realizados durante muchos meses con las autoridades israelíes y libanesas en estrecha colaboración con Estados Unidos». «Francia no escatimará esfuerzos para apoyar la aplicación de este acuerdo. Lo hará con la fuerza provisional de Naciones Unidas en Líbano, en la que desempeñamos un papel central», ha señalado el mandatario en un vídeo publicado en la red social X, agregando que es «importante» que se respete el acuerdo.
De igual forma, Macron ha asegurado que París apoyará el trabajo de las Fuerzas Armadas de Líbano en el marco de la propuesta, que permitirá restablecer la seguridad tanto de los libaneses como de los israelíes y el «regreso seguro» de los desplazados. Por otro lado, el presidente francés ha insistido en que la restauración de la soberanía de Líbano pasa por la elección «inmediata de un presidente» que permita «unir a los libaneses mediante la formación de un gobierno fuerte y representativo». Otro de los que se ha pronunciado ha sido el primer ministro de Reino Unido, Keir Starmer, quien ha asegurado que el acuerdo de alto el fuego será un «alivio» para miles de civiles en Líbano y el norte de Israel que han sufrido las «consecuencias inimaginables» del conflicto.
«Este acuerdo debe convertirse en una solución política duradera en Líbano basada en la resolución 1701 del Consejo de Seguridad, que permitirá a los civiles regresar permanentemente a sus hogares y que las comunidades de ambos lados de la frontera se reconstruyan», ha señalado el ‘premier’ británico en un comunicado.