Tras el anuncio este martes 4 de febrero de la Corte Constitucional, que declaró la inconstitucionalidad del artículo
28 de la Ley 1816 de 2016 (Ley de Licores), las licoreras del país se pronunciaron al respecto.
Es importante recordar que esta Ley facultaba a las Asambleas
departamentales y gobernadores de departamentos productores de aguardiente para restringir o prohibir, a través de salvaguardas, la introducción de otros aguardientes provenientes de otros departamentos a su jurisdicción territorial.
Así las cosas, las licoreras del país podrán competir libremente con sus aguardientes en todo el país dejando que sea el consumidor quien tome la decisión de cuál comprar.
Aguardiente Amarillo
Esta decisión permite que el Aguardiente Amarillo de Manzanares, de la Industria Licorera de Caldas (ILC) ya se pueda vender en Antioquia para hacerle competencia al Aguardiente Real 24, que hace poco fue relanzado por la Fábrica de Licores de Antioquia (FLA).
Entre estas dos licoreras hubo polémica cuando la FLA lanzó su propio aguardiente amarillo, pero al poco tiempo tuvo que retirarlo del mercado ya que su presentación era muy similar a la del Amarillo de Manzanares.
Lo que dice la FLA
Esteban Ramos, gerente de la FLA, manifestó a finales del 2024 que la licorera de Antioquia es líder en el mercado de aguardientes con más del 57 por ciento de participación.
El gerente agregó que la utilidad operacional de la FLA superó los 218.000 millones de pesos, lo que significa un crecimiento del 23% respecto al 2023.
Sobre la decisión de la Corte Constitucional, la empresa emitió un comunicado en el que indica que está lista para conquistar nuevos mercados en el país.
La FLA, con su Aguardiente Antioqueño, busca conquistar nuevos mercados en los departamentos de Valle, Cauca, Nariño, Boyacá, Huila, Putumayo y Caquetá buscando seguir siendo la empresa líder en la comercialización de este licor en el país.
“En medio de la apertura de nuevos mercados, desde nuestro liderazgo mantendremos siempre la premisa de fortalecer la industria de licores en Colombia y que la fábrica siga con su propósito superior de apalancar proyectos para la salud, la cultura, el deporte y la educación”, indicó el gerente de la FLA, Esteban Ramos Maya.
La ILC se expresa
También en un comunicado, la Industria Licorera de Caldas (ILC) se mostró complacida con el nuevo anuncio e indicó que “con dicha restricción, se vulneraban las normas constitucionales que protegen el derecho a la libre competencia que tienen todas las empresas para concurrir al mercado y el derecho que tienen los consumidores colombianos a elegir los productos de su preferencia”.
Argumentó la Licorera que, con esta nueva disposición, las empresas licoreras productoras de aguardiente quedan en un ambiente justa competencia en el mercado nacional y con la posibilidad de llevar sus productos a todos los rincones del país.
“Con esta decisión, la Industria Licorera de Caldas (ILC) podrá vender su Aguardiente Cristal en todo el territorio nacional, y el Aguardiente Amarillo de Manzanares podrá ser comercializado y consumido en los 32 departamentos sin restricción alguna, y en
especial, podrá ser ahora también introducido y vendido en los departamentos de Cundinamarca (que incluye Bogotá, D.C.), Antioquia, Valle del Cauca, Boyacá, Cauca, Nariño, Huila, Chocó, Caquetá y Putumayo”, afirmó la ILC.
Sobre las rentas
La empresa caldense agregó que, con este fallo, se incrementarán las rentas que reciben los departamentos para invertir en la salud y educación de sus habitantes.
“Esas rentas no están en riesgo, pues, por el contrario, cuantas más botellas de aguardiente se vendan en el departamento, sea cual sea su marca o procedencia, más participación y derechos de explotación recibirán los departamentos por la introducción y venta de aguardientes en sus jurisdicciones”, puntualizó la empresa.