Tal como expuso Diario Rombe el pasado 24 de marzo en el artículo “El caso de Multiservicios SOFA, S.L.”, una empresa de importación de material de oficina y suministros escolares en Bata, recibió una transferencia de 741 millones de FCFA en su cuenta en el Banco Nacional de Guinea Ecuatorial (BANGE), procedente de la empresa Maurel & Prom Gabon S.A. a través del Banco BGFI de Gabón. Con el control absoluto de Manuel Osa Nsue sobre BANGE (ahora Primer Ministro) y la complicidad de Santiago Casto Nvono Bibang (hoy Viceministro de Turismo) entonces Director General del Gabinete del Vicepresidente Segundo, Teodoro Nguema Obiang Mangue el banco bloqueó los fondos sin motivo legítimo, amparándose en una falsa excusa de “actividades subversivas” supuestamente cometidas por Multiservicios. Esta acusación, sin pruebas y completamente fabricada por Santiago Casto, sólo tenía un objetivo: justificar el robo de los fondos y castigar al legítimo dueño por atreverse a exigir su devolución.
Santiago Casto entonces Director de Gabinete actuó de manera calculada y traicionera para enfrentar a Teodorín con su propio padre, el presidente Obiang, moviéndose en las sombras para manipular la relación entre ellos. En lugar de cumplir con su responsabilidad como director de gabinete y asesorar legalmente al Vicepresidente, Casto buscó torcer la ley, aprovechando su posición para incitar a Teodoro Nguema Obiang Mangue a confiscar los fondos de Multiservicios sin mandato judicial, una acción ilegal que compromete al Vicepresidente y a su propio padre.
Está información queda reflejada en los documentos obtenidos por Diario Rombe que muestran que, el 1 de abril de 2014, Teodoro Nguema Obiang Mangue ordenó a su entonces Director de Gabinete, Santiago Casto Nvono Bibang, transferir los 741 millones de FCFA a la cuenta del Ministerio de Defensa Nacional, titulada “Curso de Reciclaje Militar” abierta en el Banco CCEIBank Guinea Ecuatorial. No satisfechos con apropiarse ilegalmente de los fondos, Santiago Casto Nvono Bibang, alias Pinto, ordenó el encarcelamiento del propietario de Multiservicios SOFA, S.L durante cuatro años para impedir cualquier intento de recuperación de su dinero.
El escrito de Obiang
Dos años y cinco meses después, Teodoro Obiang Nguema tuvo conocimiento de la confiscación ilegal de los 741 millones de FCFA, así quedó reflejado en un escrito fechado el 14 de septiembre de 2016 al que ha tenido acceso Diario Rombe. En el escrito, Teodoro Obiang Nguema Mbasogo exigió a su hijo, Teodoro Nguema Obiang Mangue, una “aclaración urgente” sobre la justificación legal de la incautación y amenazó con «medidas correctivas» contra quienes habían actuado ilegalmente si no se devolvían los fondos al propietario. Sin embargo, en un acto de insubordinación y absoluta impunidad, asesorado por Santiago Casto, Teodorín ignoró la orden de su padre y mantuvo los fondos incautados sin ofrecer explicación alguna.
Cuando Obiang descubrió la maniobra y ordenó devolver el dinero, Santiago Casto Nvono Bibang ocultó intencionalmente el escrito del Presidente al entonces Vicepresidente Segundo, desobedeciendo la orden y orquestando la detención del director de Multiservicios Sofá, para desviar la atención y asegurarse de que nadie cuestionara su papel en la operación. Con esta movida, Casto demostró que estaba dispuesto a cualquier cosa para mantener su control sobre Teodorín, usando su nombre y su poder como si fueran propios y protegiéndose a sí mismo a cualquier costo.
Santiago no solo manipuló a Teodoro Nguema Obiang Mangue para apropiarse de esos fondos supuestamente para el Ministerio de Defensa, sino que además le incitó a ignorar la autoridad de Obiang, generando una ruptura de confianza entre padre e hijo. Esta estrategia reveló la naturaleza oportunista y desleal de Casto, quien se dedicó a sembrar discordia en la familia presidencial para proteger sus propios intereses y su posición. Sabía perfectamente que Obiang desautorizaría esa transferencia ilegal, pero aún así, empujó a Teodorín a actuar en su contra, exponiéndolo a las represalias de su padre y al desprecio público.
El temor de la Corte Suprema a Teodorin
Este comportamiento ha convertido a Santiago en un personaje repudiado por los ciudadanos, quienes lo consideran uno de los elementos más tóxicos en el entorno de Teodorín. Casto no solo abusó de la confianza de su jefe, sino que también puso en jaque la relación familiar entre el Vicepresidente y el Presidente, todo con tal de mantenerse en el poder y evitar las consecuencias de sus actos. Su influencia corrupta y divisiva terminó por revelar sus verdaderas intenciones: no era el asesor de confianza que decía ser, sino un oportunista dispuesto a sacrificar la unidad familiar y la estabilidad política para salvaguardar sus propios intereses.
Frente a este abuso flagrante, Multiservicios SOFA, S.L, representado por el abogado Ponciano Mbomio Nvo, demandó al Banco Nacional de Guinea Ecuatorial por incumplimiento de contrato y ganó en todas las instancias judiciales, desde el Juzgado de Primera Instancia hasta la Corte Suprema de Justicia. Sin embargo, la sentencia nunca se ejecutó: la Corte Suprema de Justicia, claramente sometida al poder del Vicepresidente, se negó a ordenar la devolución de los 741 millones de FCFA. Este caso expone no sólo la corrupción rampante, sino la manipulación de las instituciones judiciales en Guinea Ecuatorial, donde la justicia es un mero instrumento de los poderosos para proteger sus abusos y atropellar a las verdaderas víctimas.
